Una tarde con los Indios

Como todos ustedes saben, ya viene el día del niño. Lo que probablemente no todos ustedes sepan, es que mi hijo está en la escuela de futbol del Club Indios. Pues bien, ahi anda el único vástago macho de mi robusto tronco, tirando patadas y pelotazos semana tras semana. Sucede que en el mismo equipo de niños está el hijo de un jugador de los indios, un argentino llamado Carlos Casarteli. Aquellos de ustedes que conozcan un poco de futbol, y de la liga mexicana, segurmante recordarán a este jugador que brilló en algunos equipos, como el atlante y los tecos, y algunos otros cuyo nombre se me escapa en este momento. El caso es que casi todos los días que hay juego, Carlos va a ver jugar a su hijo, al igual que los demas papás vamos a ver a nuestros propios hijos (solo falta cuando los Indios salen a jugar fuera de Juárez), y ahi se acopla con todos los papás. Hace un par de semanas, al terminar un partido, Carlos preguntó qué le íbamos a hacer a los niños con motivo del día del niño. Pues con eso bastó para que las mamás arguenderas se comenzaran a organizar para hacer un convivio (en la cancha donde entrenan), con hot dogs, y dulces y pastel. Carlos dijo que él, por su parte, iba a procurar llevar a algunos jugadores de los Indios, para que los nños pudieran convivir, tomarse fotos y pedir autógrafos. A mi en lo personal se me hizo algo muy amable de parte suya, y pensé que iba a llevar unos 3 o 4 de sus cuates del equipo. Pues se llegó el día del convivio, y ya estaban los niños y las mamás, y algunos papás, y se estaban haciendo juegos muy padre, cuando llegaron los Indios. Pues no fueron 3 o 4, sino que iban 12, y la mayoría titulares. Todos los jugadores muy amables, dando autógrafos, y tomándose fotos. Manuel obtuvo los autógrafos de todos, y no se retrató con todos porque se llenó la cámara (pero esa es otra historia), pero si se retrató con algunos, como Sebastian Maz, Edwin Santibañez (que jugó muchos años en el América, pero ya rectificó, y ya esta en un buen equipo), Tomás Campos (que jugó con Cruz Azul y con Jaguares), Juan Augisto Gómez, y con otros mas locales, como el Maleno Frias, y otros de cuyo nombre no puedo acordarme. Luego que se hubieron retratado y convivido, dijo Carlos: "buenos, pues ahora a jugar!", y que se hace la cáscara. Eran los 12 jugadores de los Indios contra unos 30 niños, con edades de 5, 6 7 y 8 años. Y ya se imaginarán a los niños corre y corre, y los jugadores grandes vacilándolos, y haciendo sus jugadas de fantasía. Y asi duraron un buen rato, y ya mas tarde se retiraron. Fué una tarde muy agradable, y los niños salieron muy contentos (y muy motivados, ya que al día siguiente tuvieron partido, y salieron con una victoria contundente).

Bueno, este post a lo mejor no está muy divertido, pero no quería dejar pasar la oportunidad de escribir acerca de esta labor que hacen los jugadores, ya que su trabajo no solo es ir a patear un balon, sino integrarse a la comunidad, visitar escuelas, y ser ejemplo de muchos niños que los admiran, y los ven como un ídolo deportivo a quien imitar, como la ven?